sábado, 5 de diciembre de 2009

Los buenos y los malos colegios (Aporte de un lector)


Discretamente hecho, este comentario es de la autoría de Pablo Cuartas. Un muchacho que estudió Ciencia Política en la Universidad Nacional (sede de Medellín) y ahora estudia y radica en la cuenca del Sena. Lo pongo aquí como una entrada de mi blog (que es vuestro blog) pero a su nombre. Es una opinión muy interesante que toca el tema y los comentarios de la entrada anterior acerca de los colegios y sus calidades.

ACERCA DE LOS COLEGIOS

POR: Pablo Cuartas.

El tema de los buenos y los malos colegios es menos banal de lo que parece. Lo que se ha dicho está en clave de humor, claro está, y no intento decir nada “serio” sobre el tema. Es más: no intento decir nada nuevo con respecto a lo que ya se ha dicho.

Dos palabras me vinieron al pensamiento cuando pude parar de reírme a causa de las anécdotas relatadas por Sebas. Son dos palabras que usó un sociólogo francés muy importante que se llama Pierre Bourdieu. Son las palabras “herencia“ y “reproducción”. Con ellas, el antiguo profesor del Collège de France quería señalar cómo el sistema educativo perpetúa las diferencias sociales. Los “herederos“ -de los que Bush es buen ejemplo, aunque no el único- forman parte de una especie de inercia social que las instituciones educativas avalan socialmente. De Bush, por ejemplo, se sabe que era un borrachín, un gángster, un incapaz. Pero recuerdo que mi profesor de francés en Bogotá, Jaime González, me mostró una vez un recorte de Semana donde los compañeritos de clase de Andrés Pastrana en el San Carlos contaban las “triquiñuelas” que hacían las delicias de estos hijos de la élite tropical. No las cuento aquí, pero recuerdo que le dije a Jaime: “Es para hacer maletas e irse del país”.

Como yo estaba precisamente a punto de irme del país, como venía a vivir al país de Bourdieu y de otros como Foucault (sí, Sebas, me gusta Foucault), entonces recibía clases intensivas de francés con Jaime. Un día llegó un estudiante del Colegio Helvetio, o Helvetia, o Helvecia, no sé, que es como el Liceo Suizo de Bogotá. Es como el San Carlos de ahora, el Nueva Granada de hace una década o el Gimnasio Moderno de siempre: un colegio de élite, de los que no tenemos en Medellín. En Medellín hay colegios de ricos, porque en medellín no hay élites, hay ricos. Son dos cosas distintas. El hecho es que este estudiante del colegio suizo llegó para hacer revisar de Jaime su “tesina” de grado como bachiller. Yo estaba presente y comprobé horrorizado que, palabras más palabras menos, el sujeto hablaba tres idiomas sin hablar ninguno. Qué ortografía, qué fonética, qué gramática. Era un franespanglish desastroso pero, me imagino, muy impresionante en un país capaz de elegir a Pastrana como presidente. De esa tarde me acordé hace poco al leer, en El Espectador, la columna de una señora bien de Bogotá. Creo que se llamaba Cristina Lleras, o algo así. Estaba muy escandalizada porque vio cómo en el Pomona que queda justo en frente del Gimnasio Moderno, los estudiantes que van a “heredar” este país comían como cerdos. Según la señora Lleras, los gimnasianos dejaron el lugar rebosante de basura. Claro, esta “señora bien” exagera, pero sólo un poco.

De ahí a afirmar que las ratas son insectos invertebrados no hay más que un paso. El estudiante del colegio suizo hubiera podido decir eso o algo peor, pero en su medio sofisticado sólo sería una “boutade”. En cambio, como los que lo dicen son esos estudiantes del MFS (Mariguana Fresca y Suave, se decía en mi infancia que traducían esas siglas), con esas sudaderas rojas y esos peinados pintorescos o temerarios, entonces ahí el mundo social sí no perdona. Las travesuras con rifles de Bush en Texas, las bromas pesadas del jóven Pastrana a los miembros de la guardia presidencial, y tantas otras infidencias sin contar de nuestra élite, pasan desapercibidas porque suceden en el colegio San Carlos, o en Yale, pero no en bus de Laureles que atraviesa toda la 70 en Medellín. Gracias a la reproducción inercial que estas instituciones avalan, ellos pueden hacer lo que quieran, o no hacer nada, e igual seguirán heredando.

Bien vistas las cosas, la diferencia es menor entre la tontería de unos y la de otros. Pero es sobre estas diferencias menores que se funda la desigualdad. Es como si la estupidez de carro blindado fuera menos grave que la de buseta. Hay que ver cómo las oportunidades les sobran a aquellos que no se privaron de comer como cerdos, pero lo hicieron en Pomona. Evidentemente hay que batirse para que la educación sea pública, universal y de calidad, pero ante todo hace falta abandonar ese arribismo que nos hace perdonarle la ignorancia a los que estudian en colegios bilingües y condenar a los que la reciben en colegios donde no se habla ni español. Esas son las enormes sutilezas que deciden todo en la vida social.

Perdón por semejante encíclica que, en realidad, no es más que la opinión de un simple egresado del INEM.




4 comentarios:

  1. mmm noto cierto resentimiento en el texto pero tambien hay aciertos en algunos aspectos. Unas correciones;

    Primero: eso del gimnasio moderno es pacialmente verdad, ese colegio ha cambiado mucho, y pienso que generalizar es algo erroneo cuando se pone el caso de los estudianets en pomona.La situacion en ese colegio, desde hace muchos años, ha cambiado debido a que por malos manejos administrativos principalente, el rendimiento academico del colegio ha vendio disminuyendo progresivamente y eso ha hecho que muchas familias busquen otros colegios para sus hijos, lo mismo suecede con el bilinguismo, porque el mundo es poliglota, mixto y competitivo. Por eso mismo en el colegio han sacado a muchos alumnos y vienen ofreciendo los cupos a estudiantes de muy bajo rendimiento academico, por lo general echados de otros planteles de mayor categoria tanto social como academica y esos son los "emperadocitos que botan la basura en pomona" del articulo del espectador.

    2ndo: Cuando hablan de los colegios gomelos como el "Helvetia" si (efectivamente fundado por la colonia Suiza en Bogota) , el nueva granada, el anglocolombiano o el sancarlos, son colegios con un rendimiento academico muy alto, en gran parte porque la educacion que ofrecen esta basada en curriculos de otros paises como suiza, gran bretana, usa, etc. Porque como todos sabemos las politicas del MEN rayan en lo obsoleto llegando a lo arcaico, como casi todo lo que existe en Colombia. Asi que que el problema consiste en cambiar esas politicas y cambiar el arribismo y mala educacion de la suciedad chibchombiana.

    3ero: es cierto que bush es un alchoholico, pero tambien es cierto que a jenna, la hija de bush, la corte la multo por conducir hebria ( http://edition.cnn.com/2001/LAW/07/06/jenna.court/)... a ver si en chibchombia se atreven a multar a algun delfin por infringir la ley?? O sea el problema es que en chibchombia la ley es para la plebe mas no para los patricios... hasta donde yo se el imperio romano dejo de existir hace 1600 años... pais tercermundista al fin y al cabo

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  2. Gracias por la opinión Ferdinand34. Completamente de acuerdo con la opinión sobre la obsolescencia tan vergonzosa de los curriculums que en promedio se utilizan en este país para cursar los años de educación secundaria. Muchos de nosotros, sinceramente, creo que le debemos más nuestro aprendizaje del inglés o de otras lenguas a canales como HBO o TV5, que a los señores que impartían esos cursos en los colegios de los cuales provenimos. Saludos!

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  3. Es verdad, la educacion es una farsa en Colombia, lo unico que los ninos y jovenes pueden desarrollar en los colegios de elite es la sociabilizacion dentro de su misma elite, y esa relacion es la que le importa a la misma elite, perdon la redundancia!!!!, y asi no aprendan nada.

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